Hola mis viajeros!! En el post de hoy os voy a dejar 10 cosas que hacer en Salzburgo, completamente factibles en un solo día.
Lo primero que os aconsejo es haceros con una tarjeta de la ciudad, llamada “Salzburg Card”. En Salzburgo no son caras y la infinidad de posibilidades que os ofrecen merece muchísimo la pena.
Para 24 horas el precio es de 26€ y os incluye: entrada libre a todas la atracciones turísticas y museos, viajes gratuitos en transporte público (incluye el funicular de la Fortaleza, el teleférico de la montaña Untersberg y el ascensor al monte Mönchsberg) y un crucero por el río Salzach.
Si os interesa y queréis más info de la tarjeta, podéis pinchar aquí.
Desde aquí quiero agradecer a la oficina de turismo de Salzburgo el habernos facilitado la tarjeta para los dos días que pasamos en la ciudad, esto nos facilitó nuestra visita muchísimo. Pero quiero dejar claro que todo lo que aquí cuento es fruto de una experiencia objetiva y que no os aconsejo absolutamente nada que no nos encantara.
Dicho esto, empezamos.
10 cosas que hacer en Salzburgo:
El Palacio y los jardines de Mirabell: a pesar de que tras los muros del palacio, hoy se encuentran las oficinas del alcalde de Salzburgo y del Consejo de la ciudad, el palacio fue construido en 1606 por el príncipe arzobispo Wolf Dietrich. Como su propio nombre indica, es admirable y bello. Y sus jardines, no se quedan atrás. Quizás os suenen de la archiconocida película “Sonrisas y lágrimas”.

Residencia y Casa Natal de Mozart: esto está dividido en dos edificios distintos, y separados en distancia. Si elegís solo uno, que sea la casa natal. Pero ambos me gustaron muchísimo porque relatan a la perfección la biografía del compositor.

Getreidegasse: La calle del Grano, es la calle principal del centro histórico de Salzburgo. Tiene un encanto especial porque conserva la esencia de su historia y sus tradiciones. En ella sobretodo encontraréis tiendas y restaurantes. Y aquí mismo es donde se sitúa la Casa Natal de Mozart.

Monchsberg y sus vistas a la ciudad: os aconsejo subir en el ascensor MoenchsbergAufzug, que se encuentra al final de la calle Getreidegasse. En principio el elevador es para subir al Museo de Arte Moderno, pero desde ahí podéis cruzar todo el monte Monchsberg camino a la fortaleza, sin perderos las vistas que deja sobre la ciudad.

Fortaleza Hohensalzburg: podemos decir que entre los años 1077 y 1500 la fortaleza tomó la arquitectura que hoy podemos apreciar. No olvidemos que es la fortaleza contiene el castillo mejor conservado de toda Europa Central. La fortificación fue creada para mantener a salvo al principado y a los arzobispos, y esta nunca llegó a ser conquistada.

Catacumbas y Cementerio Petersfriedhof: muy cerquita de la fortaleza, encontraremos la Abadía de San Pedro. Una visita muy recomendable y con un halo misterioso, es su cementerio y sus catacumbas. Es el cementerio más antiguo de la ciudad y por su entorno y su cuidado, es uno de los más bellos de Austria.

DomQuartier y La Catedral de Salzburgo (Salzburger Dom): El barrio de la Catedral de Salzburgo y la mismísima catedral, son dignos de reconocimiento. Este edificio barroco del siglo XVII es bellísimo tanto por fuera como por dentro y es a su vez el edificio religioso más importante de la ciudad. Como dato curioso, cabe destacar que Mozart tomo aquí su bautismo, y más tarde se convirtió en su organista.

Residenzplatz: esta gran plaza, en el centro histórico de Salzburgo, es famosa porque en ella se encuentran tanto la antigua como la nueva residencia principesco-arzobispal. En esta plaza pública se suceden durante el año conciertos y festivales, y es uno de los centros neurálgicos de la ciudad.

Puente Makartsteg: el famoso puente de los candados de esta ciudad, al igual que en París o en otras capitales europeas. Independientemente de los candados, me parece uno de los mejores puentes para cruzar el río, ya que las vistas de la ciudad son maravillosas desde aquí.

Crucero por el río Salzach: y qué mejor broche para acabar el día en una ciudad tan preciosa y elegante como Salzburgo, que observarla desde el agua, viendo las últimas pinceladas de sus edificios más importantes a la vez que va anocheciendo.

A mi desde luego Salzburgo me enamoró completamente, y fue ese punto de inflexión del viaje donde me quedé prendada de todo lo que había visto de Austria, a pesar de no conocer aún Viena, su capital.
Espero que estas 10 cosas que ver en Salzburgo os animen a conocer una ciudad que se clava en el corazón de todo el mundo que la visita.
Un abrazo a todos, y nos vemos en el próximo post!